Os copio textualmente y pego el artículo del 20 minutos porque me parece que no tiene desperdicio.
Hace tan solo unas semanas que TVE decidió prescindir de la versión junior de Eurovisión porque fomentaba valores adulterados para la infancia. Los americanos, lejos de plantearse este tipo de cuestiones éticas, han creado el formato infantil de Gran Hermano . Las quejas no se han hecho esperar.
40 niños participan en el tele-encierro realizando tareas domésticas.
El programa Kid Nation que estrenará en septiembre la CBS , ha sido denunciado por la madre de uno de los participantes, según informa 'The New York Times' .
El programa mostrará a partir del 19 de septiembre cómo conviven un total de 40 niños en una casa situada en la localidad 'fantasma' de Bonanza (Nuevo México), al sur de Santa Fe.
Explotación infantil
Durante 40 días, los niños se encargan de preparar sus comidas, limpiar, crear un gobierno y dirigir sus propios negocios, sin la intervención o participación de adultos.
Pero para Janis Miles, madre de una de las menores, la experiencia se aproxima a abuso de menores y negligencia.
Las criaturas ingirieron lejía creyendo que era refresco.
Miles envió una queja a las autoridades de Nuevo México después de que el programa acabase la fase de producción.
El periódico recoge que tanto la madre como la CBS coinciden en que varios niños necesitaron cuidados médicos tras ingerir lejía que alguien había dejado sin identificar en una botella de refresco.
La cadena responde...
Los responsables de la cadena de televisión aseguran que no han violado ley alguna.
"Nos sentimos seguros de que esto fue correcto desde el punto de vista legal", dijo al 'New York Times' Ghen Maynard, vicepresidente ejecutivo de programación alternativa.
La emisión de 'Kid Nation', el único espacio de su estilo en la televisión estadounidense, ha generado gran expectación y críticas desde que CBS dio a conocer sus planes en mayo pasado.
Veamos... por dónde empezar. Supongo que el edredoning ya no vende como antes, así que habrá que ir innovando. Tampoco debe vender ya lo de ver a unos cuantos tolais criar cerdos, vacas, gallinas y ver cómo se va pudriendo el césped mientras discuten sobre la cantidad de cigarrillos que van a fumarse cada uno a falta de macarrones que echarle a la cazuela (porque claro, ya se sabe, lo de fumar... siempre es mejor meter el dedito en el agua de los macarrones, que seguro que algo de sustancia te llevas, que tener que destinar parte del presupuesto de tabaco a ese vicio que es comer tres veces al día. ¿O no?)
Ahora lo que está de moda es que los niños lo emulen todo. Si total, eso lo hemos hecho toda la vida. Porque, ¿quién no se ha puesto los tacones, los collares y los vestidos de su madre y le ha cogido el lápiz de labios y el colorete a escondidas y se ha puesto perdido de potingues enfrente del armario? ¿Qué niño del mundo no ha intentado imitar a su padre con el bricolaje? O viceversa, oiga. Pero la verdad es que eso... eso está pasado de moda. Y total, si cada vez vamos aumentando las dosis de morbo, de horterada, de estupidez... ¿cómo va a hacer eso un niño de hoy en día? eso era cuando no teníamos ni wii's, ni play 3, ni videojuegos, ni mp3, ni nos regalaban un móvil a los 7 años. Cuando jugábamos en la calle y no era raro que con 14 años todavía estuvieras jugando a las muñecas, a la goma, o al escondite con la pandilla, o cuando lo más fuerte que hacías era pegar una moneda en el suelo con superglue o meterle un petardo a una mierda de perro.
Pero ahora para imitar hay que ir a eurovisión junior y convertirte en la nueva "shakira infantil" del año (con todos mis respetos a Shakira, pero a mí me resulta grotesco ver a una niña de 9 años pasar tres minutos cantando y moviéndose como si estuviera en celo. Eso cuando una ya pasa de los 16-17, la adolescencia ataca, pues bueno está, pero... 9 añitos... es una NIÑA. Hoy en día las niñas de 14 se visten, se peinan, salen, actúan y se comportan como si tuvieran 20.
No se trata de puritanismo, pero cada edad tiene sus cosas y la infancia tiene que ser infancia. Los niños tienen que ser niños y mantener la inocencia, que bastante mal les va a tratar la vida más tarde, y crecer tranquilos. Dejémosles crecer, digo yo.
Así que, ya puestos, si la niña, cuando tenga 14 años se va a desnudar delante de una webcam para que cualquier salido (desde niñatos de su edad hasta pederastas que pueden destrozarle la vida) se marque un meneíto de zambomba, por qué no vamos a meter a 40 criaturas, de unos... 8 años, más o menos, a que hagan la vida de un adulto. Que sí, está muy bien que cuando antes aprendan los niños a valerse por sí mismos, mejor. Que necesitan aprender a cocinar, o tener bien claro que tienen que mantener su casa lo más limpia posible y todas esas cosas, pero que a los 8 años, lo más que debe cocinar un niño es un huevo frito para una emergencia, o una tortilla francesa, o unos macarrones con atún y tomate frito. Y desde luego, si han de valerse por sí mismos como si un tornado hubiera arrasado el resto del país-continente-planeta, con algo de control y vigilancia. Que lo que no es normal es que las criaturas vivan peor que el pupas, que se juega con chiquillos, y al menos yo, no entiendo cómo puede ser que, al menos conociendo el formato español, en que se está 24 horas observando a los concursantes, beban lejía confundida con un refresco.
Y lo que desde luego ya escapa totalmente a mi comprensión, es esa madre que ahora denuncia que el asunto se aproxima a la negligencia y el abuso de menores, puesto que la primera negligencia es de los padres que meten a sus hijos en semejante circo y el abuso de menores empieza cuando los papás se lucran (o tienen intención de lucrarse) a costa de que sus retoños pasen 40 días, no de campamento, sino en un reality. Es cierto que la negligencia es de campeonato, pero también es cierto que no se pueden pedir peras al olmo y denunciar algo que podrías haber pensado y evitado tú, de lo cual eras plenamente consciente y que, además, supongo que firmaste para que estuvieran solos y expuestos.
Habría que sacar de ahí a esas criaturas urgentemente, pero mantener vigilados también a sus padres, porque quizá no corran el mismo peligro con ellos que solos en una casa durante 40 días, pero esos padres no son la forma, precisamente, de pasar una infancia medianamente segura
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