23 abril 2007

10 libros que te han marcado

Recojo el meme del blog del pito doble porque no me había acordado yo de que hoy es el día del Libro. Hoy conmemoramos la muerte (hay que ver que somos majetes, ¿no? dos genios de la literatura se mueren y nosotros vamos y lo celebramos, jajaja) de William Shakespeare y D. Miguel de Cervantes Saavedra, tal día como hoy del año del señor de 1616 (bueno, en realidad, dice la Wikipedia, que no lo digo yo, que se murió el 22, pero a Cervantes lo enterraron el 23).

Así que os invito a ordenar los 10 libros que os hayan marcado. Estos son los míos.

1. Lo que el viento se llevó: uno de los primeros libros que recuerdo conscientemente. En mi adolescencia debí leerlo unas... 7 u 8 veces, poco más o menos.
2. El Quijote: fue lo primero que leí y en mi familia todos se quedaron con los ojos como platos. Un buen día, me aburría (cuando tenía cuatro o 5 años), enganché la edición infantil que tenía mi hermana en nuestro cuarto y sorprendí a mi madre: "En un lugar de la mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme..." Después me costó muuuchos años llegar a leermelo, diremos que unos 15, poco más o menos, y después de mucho decir que era un pelmazo, llegue a disfrutarlo muchísimo. Es un gran libro de humor, aunque parezca un topicazo.
3. El mundo de Sofía: fue la puerta de entrada a cosas más... "serias": me lo regalaron con 14 años y lo devoré. Me abrió la puerta a la filosofía.
4. Niebla: me hizo descubrir al grandísimo Unamuno. Es otro de los libros que conservo desde hace muchos años y que he releído muchas veces.
5. La casa de Bernarda Alba: en realidad he elegido esta porque he vivido una situación personal que podría recordar a aquella casa lorquiana, pero bueno, lo dejaremos en la esfera de lo personal. En el escenario siempre quise llegar a ser Bernarda, pero sólo lo conseguí haciendo teatro leído y a lo más que he llegado, ha sido a Magdalena. Me sirvió para descubrir a Lorca, y aunque he citado esta, que no es, ni de lejos, de sus mejores obras, me es muy difícil escoger algo suyo. Lorca me ha marcado por sí mismo, y hasta he llegado a cantarle.
6. La vieja sirena: forma parte de la época en que venían los libros del Círculo de Lectores a casa de mi hermana y tenía la posibilidad de leer y devorar a mi ritmo, es decir, a matacaballo. Sampedro me introdujo en un mundo de magia, fantasía y erotismo del que no creo que pueda escapar nunca. Culminó con El amante lesbiano (altamente recomendado).
7. Malena es un nombre de tango: parte del proceso que empezó Sampedro y que me hizo ser plenamente consciente de mi sexualidad.
8. Los pilares de la tierra: todos sabemos que es un bestseller, que muchos no lo consideran literatura, y por tanto es alabado por unos y denostado por otros. No he podido evitar la tentación de leerlo y releerlo al menos 3 veces. Es ese libro en cuyas páginas me pierdo, que podría leer en cuestión de muy pocos días y con el que me vuelvo sorda, muda y ciega.
9. Dios vuelve en una Harley: un regalo de una casi "desconocida" que me ayudó en uno de los momentos más bajos. Le agradezco, a ella y al libro, enseñarme que todo ocurre por una razón, que no hay mal que por bien no venga, que de toda experiencia, por mala que sea, se pueden sacar cosas buenas, y que aprendiendo lo maravilloso de uno mismo y de la propia evolución, cuando menos se espera aparece eso que tanto se ha buscado y en lo que se cree haber fracasado.
10. Una historia de la Guerra Civil que no va a gustar a nadie: Juan Eslava Galán es jiennense. Yo necesito poco más para que me convenzan... pero además de eso, es uno de los historiadores más reputados de Jaén y tiene una gran ventaja: ni tira hacia un bando, ni hacia el otro. Por eso no le va a gustar a nadie. No alaba a quien quieren unos, ni machaca a los contrarios. Y precisamente eso es lo que hace falta aquí y ahora.


He dicho que pondría 10, pero no puedo dejar de hacer mención a otro, no por su calidad, ni por que me enganchase más que otro... es ni más ni menos que porque constituye una búsqueda personal que me obsesiona: los pasos de mi abuelo en la Guerra. Él murió cuando yo ni siquiera había cumplido los 7 años y nunca pudo hablarme de ello. Sé que le habría encantado. Sé que habría sido la aventura más apasionante que puede soñar un nieto. Sé que habría sido doloroso, pero habría sabido lo que pasó de primera mano y en primera persona y hoy quizá podría analizar aquello con más base. Tengo un agujero enorme en el corazón que es no haber podido conocer más a aquel grandísimo hombre que fue Blas Megías, sabio y bueno donde los hubiera y valiente hasta el punto de ser hecho prisionero tres veces, haber podido recibir hasta honores en el bando donde fue prisionero y tener los santos cojones de cambiar otras tantas veces a luchar con quien él quería. Pocos hombres pueden decir eso. Así que mi homenaje a uno de los muchos estudios sobre la batalla del Ebro, gracias al que pude aproximarme, aunque sea de muy lejos, a los pasos de Lalo.

P.D.: Nomino a Rosana, a Nano y a Isma (mis tres únicos lectores)

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Joé! Encima que después de chorrocientos mil eones de años sin vernos te encuentro en el Ramal, vestida de procesión (quiero foto con la mantilla, YA!), te digo lo gaupa que estabas (sin mentir)... Así me lo agradeces.... Nominándome!!!! Pues hale´!!! Yo te nomino a tí porque tú me has nominado; a mi mismo porque no me soporto y a la mantilla por estar en el metro escondida en la bolsa. Huviese sido divertido encontrarme en el vagón contigo y la mantila puesta, juas.
Un besooooo

Rosana dijo...

Jajaja... Mira, mira, este es más espavilao que yo y a lo tonto, a lo tonto, se desvia del tema y no responde! Y yo poniendote excusas... :$

Ñe!

el de la trompa dijo...

Ostras nano soy yo??

Si es que tendrias que haberme puesto un enlace o algun comentario pa que me hubiera enterado...

Apunto el meme, pero que sepas que no se si he leido tantos libros... jajaja

Rosana dijo...

Uys este está como yo... xD